martes, 24 de diciembre de 2013

Franceska Jaimes

A Nacho Vidal hay que agradecerle muchas cosas en esto del porno. Además de dejarnos un buen puñado de escenas inolvidables o ser el protagonista de anécdotas increíbles, también conviene recordar que de su mano muchas han sido las chicas que se han atrevido a dar el paso de ponerse delante de una cámara.

Ya sea de manera directa o indirecta, Sara Bernat, Rebeca Linares y tantas otras tuvieron su primer contacto con el porno gracias al taladrador de Mataró. Pero si hay un nombre que destaca entre ese listado de debutantes gracias a Nacho ese es sin duda el de Franzesca Jaimes.


Nunca, nunca, nunca, podremos estarle lo suficientemente agradecidos a Nacho el habernos descubierto tamaño culazo colombiano. Un auténtico animal sexual, devoradora de hombres, mujeres o lo que se le ponga por delante que sin duda ha sido la mayor estrella que Colombia a dado a este negocio.

Su debut se produjo de forma anónima, tras una máscara y bajo el nombre de Morgana en "Nacho Rides Again", compartiendo la escena principal del film junto a su por entonces marido y la televisiva Lucia Lapiedra.


El cuerpazo que gastaba y su fiereza no pasaron inadvertidos y rápidamente corrieron rumores de quien podría esconderse tras la máscara. Pero pese a ello tardaría unos cuantos años en atreverse a dar el paso definitivo de debutar en el porno sin atavíos innecesarios y a rostro descubierto.

Su entrada, ya legítima, en el negocio fue todo un bombazo que sacudió los cimientos del porno patrio. Nunca en la historia de nuestro género una actriz había aunado de esa manera carnalidad, belleza y deseo en tan altas cantidades.


Su declaración de intenciones fue clara, sólo quería follar con pollas grandes y bien duras, nada de medias tintas.

Al poco de llegar ya estaba recorriendo el porno americano junto a Nacho dejándonos una colección de escenas absolutamente inolvidables en las que la pareja domina a placer a lo más granado del star system del porn valley. Sus encuentros con Dana DeArmond o Bobbi Starr son directamente historia de nuestro género.

Pero todo no podía ser felicidad y el alto temperamento de la pareja echaba chispas y los roces eran inevitables. Idas y venidas continuas con numerosas rupturas y sus correspondientes reconciliaciones.


Aún así esto no afectó en exceso la carrera de Franceska, que ya había conseguido labrarse un nombre por si misma y a la que se rifaban las mayores productoras del mundo.

Y es que viéndola en pantalla no es de extrañar que para muchos sea la mayor estrella latina que ha parido la industria del porno en Colombia.